La Terminal de Pago para ti
Si estás pensando en pedir un préstamo a una institución financiera, lo primero que tienes que tomar en cuenta es que no es lo mismo pedirle dinero prestado a un amigo o familiar, pues la entidad financiera (ya sea una empresa fintech o un banco) cobrará un monto extra que se conoce como una tasa de interés.
Pero qué son los intereses
En muchas ocasiones un negocio puede necesitar un fuerte suma de dinero para comprar equipo nuevo, abrir una nueva sucursal, re abastecer su inventario, etc. Todas estas necesidades significan una inversión fuerte y en la mayoría de las ocasiones los emprendedores no cuentan con la liquidez, o sea con el monto total disponible y por ello deciden solicitar un préstamo.
Si el préstamo se pide a una entidad financiera (ya sea un banco o una empresa fintech), ésta cobrará un monto adicional al dinero que se presta. Ese extra que se debe pagar es una tasa de interés y, en el caso de un préstamo, es el monto que gana la entidad financiera por brindar ese dinero.
Entonces, en palabras sencillas, podríamos entender que:
En un préstamo, la tasa de interés es la suma de dinero que se paga a una entidad financiera, a cambio de tener liquidez.
Para entender este tema con un poco más de profundidad, también podríamos considerar que la tasa de interés es el indicador, en términos de economía y finanzas, para saber el costo de un crédito. Este costo, a su vez está relacionado a lo que los bancos centrales de cada país determinen pero también influye el monto que se pide y el tiempo en el que se deberá devolver la cantidad prestada. Otro aspecto a considerar es que la tasa de interés se calcula en porcentajes y comúnmente se aplica de manera mensual o anual.
Es decir, que si un negocio o una persona decide obtener dinero a través de un préstamo, la tasa de interés que se cobra estará determinada por la cantidad que reciba y los plazos acordados reponer el monto.
Por ello, a la hora de elegir un préstamo es vital que los emprendedores comparen y analicen esta tasa de interés; ya que este monto, en el caso de algunas instituciones financieras, puede ser excesivo.
Tipos de interés
Existen varios tipos de intereses y esto depende del producto financiero. Por ejemplo, no es lo mismo hablar de los intereses que se generan por pedir un préstamo, que hablar de los intereses que genera al invertir o al tener una cuenta de ahorro.
Pero para no abrumarte o confundirte con tantos conceptos vamos a explicar únicamente los que podrían estar presentes a la hora de solicitar un préstamo:
Tasa de interés activa: Precio que cobra una persona o institución crediticia por el dinero que presta.
Interés fijo: Tasa de interés que se aplica durante el periodo en el que se paga el monto solicitado, cuyo valor se fija con una referencia fija, al momento de pactar los términos y condiciones del préstamo. Es independiente a la tasa de interés del mercado o sea que no es afectado si este porcentaje sube o baja por el mercado.
Interés variable: En el caso de las tasas de interés fijas, tú sabrás cuánto te costará el interés pero esto no pasa con los intereses variables ya que dependen del mercado. Es decir, que durante el tiempo en el que se pague el crédito, el interés estará directamente relacionado a cómo se comporte el mercado. Si las tasas suben, entonces deberás pagar más, pero si éstas bajan será un beneficio, pues pagarás menos.
Interés moratorio: Se tratan de intereses que se aplican en caso de que no se realice un pago para devolver el monto prestado. Es decir, este tipo de intereses se establecen como penalización, pero no se cobran si se paga a tiempo.
Por último, es de vital que no firmes nada si no entiendes por completo el tipo de interés u otras características de los términos y condiciones del préstamo que estás por solicitar.
